Justo cuando estaba a punto de alcanzar el cubo, le falló una pierna y cayó al pozo. Mientras caía, le pasó aquello tan conocido de ver de un vistazo toda su vida. Y la encontró tan lisa, igual y monótona (dicho sea entre nosotros), que se tragó el agua de ahogarse con una ejemplar resignación.
Cuento breve de Pere Calders.
Cuento breve de Pere Calders.
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